lunes, 21 de abril de 2014

Tres días para celebrar el Día del Libro en Cálamo. Firmas, lecturas, descuentos y regalos.

(c) Maranie LoMonnaco
En Cálamo no nos alcanza un día para celebrar el libro, y hemos preparado tres. Muchos planes y muchas ganas de compartirlos con todos vosotros. Nos visitarán muchos autores para firmar libros y conversar con sus lectores. Habrá lectura de cuentos infantiles y, además, el 23 de abril todas las compras en Cálamo tendrán un 10% de descuento. 
¿Te unes? ¡Pues toma nota en tu agenda!

22 de abril martes a las 20 horas: Z de Manuel Vilas.
Comenzamos con una presentación, y qué mejor que una del gran Manuel Vilas, que reedita su mítico Z en Editorial Salto de Página. Una presentación/representación en vísperas del día del libro, para cargar energías bibliófilas y prepararnos para el 23.


 23 de abril.
 Día del Libro y Día de Aragón: ¡libros y borrajas!

Como ya es tradicional, Librería Cálamo y Cálamo Infantil abrirán sus puertas en horario de 10.30 a 14.00 y de 17.30 a 19.00 horas.
Todas tus compras irán bonificadas con el 10% de descuento. Y ya sabes que te regalaremos una buena y luminosa mata de borrajas (hasta fin de  existencias).
En Cálamo Infantil a las 18.30 horas Lu de Lurdes nos contará el cuento Palabras de dragón, un nuevo libro editado por FUNDAT que recoge dos cuentos escritos por los alumnos de los colegios de Atades San Martin de Porres y San Antonio, coordinados por Jorge Gonzalvo.

FIRMAS
A lo largo de la jornada del 23 de abril, en nuestra parada del Paseo de la Independencia a la altura de la calle Cádiz nos acompañarán numerosos autores. ¡Toma nota!:



Por la mañana: Adolfo Burriel,  Carlos Castán, José Giménez Corbatón, Francisco Pellicer, Javier Grimal, Daniel Pelegrín,  Fernando Sanmartín, Rebeca Aznar, Raquel Marteles, Daniel Cid, Aitor Forcada, Julián Urbano, Andrés Statella y David Maynar.

Por la tarde: Emilio Pedro Gómez, Julio Cristellys,  Joaquín Berges, Sergio del Molino, Ángel Petisme, Severino Pallaruelo, Ramón Eder,  Estefanía Langarita, Irene Murillo y Nacho Moreno


24 de abril jueves a las 20 horas: SobreexposiciónLaura Bordonaba.
Cerramos la celebración con otra presentación: Laura Bordonaba presenta Sobreexposición, publicado por Pregunta Editorial. Lo hará acompañado por Paula M. Gallardo y Carlos Castán.


¡Os esperamos a todos!

sábado, 19 de abril de 2014

Siete obras que fueron censuradas y prohibidas y que ahora tienen prestigio mundial

La censura y prohibición de libros ha sido siempre, desafortunadamente, algo excexivamente común. Platón ya recomendó prohibir la lectura de Homero durante la formación de los jóvenes. Incluso ¿Donde está Wally? ha llegado a ser censurado por un diminuto, escondido dibujo de una mujer en topless en una playa. Entre todas esas prohibiciones, algunas ridículas, otras inesperadas, hemos elegido siete que quizás no te hubieras imaginado: 

El origen de las especies, de Charles Darwin


Aunque ahora forma parte de la educación científica que se recibe en todas las escuelas, El origen de las especies fue, desde 1859, año de su publicación, censurado en países como Grecia, Yugoslavia o Reino Unido. Entre 1925 y 1967, la enseñanza de la teoría darwinista de la evolución fue prohibida en todo el estado de Tennessee. Incluso Hitler también lo prohibió durante su régimen.
La razón principal fue siempre religiosa, pues una evolución natural de las especies se opone radicalmente a la de un origen divino para la especie humana. 

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Ulises, de James Joyce.

Portada de la primera edición del Ulises
La obra maestra de Joyce comenzó a publicarse en entregas seriales en el año 1914. En 1920 se publicó un capítulo que incluye una escena donde Leopold Bloom mira lascivamente a Gerty MacDowell y comienza a masturbarse en público. A partir de entonces, el libro estuvo prohibido por más de diez años. En 2010, una versión de Ulises para iPad fue censurada por Apple.

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Aullido, de Allen Ginsberg.

Algunas líneas manuscritas de Aullido
El poeta de la generación Beat es autor de uno de los versos más memorables de la literatura norteamericana de la segunda mitad del siglo XX:
«He visto a las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura»

Así comienza Aullido. El poema se publicó en 1956 y casi instantáneamente fue objeto de polémica, considerado escandaloso y censurado por la crudeza y obscenidad de su lenguaje. El administrador de la librería City Lights, de San Francisco, fue encarcelado por publicar y vender Aullido. Cuando la prohibición se anuló, Shig y Allen se convirtieron en amigos de por vida.

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El guardián entre el centeno, de J.D. Salinger.

Portada de la primera edición de El guardián entre el centeno
Una de las novelas de formación más célebres de la literatura es también uno de los libros más polémicos y combatidos del siglo XX. Dos semanas después de su publicación, en 1951, El guardián entre el centeno alcanzó el puesto número 1 en la lista de best-sellers del New York Times. Desde entonces, el libro ha sido objeto de censura en las escuelas y ocupa frecuentemente el top ten de la lista que la Asociación de Librerías de Estados Unidos de los libros que más quejas reciben de padres y usuarios.
¿Una curiosidad? Se dice que el asesino de John Lennon entregó un ejemplar de El guardián en el centeno a la policía, a modo de explicación por el crimen que había cometido.

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El Decamerón, de Boccaccio.

 La peste en Florencia en 1348. Grabado de Luigi Sabatelli (1772-1850)

Uno de los libros más icónicos de la literatura medieval y publicado en el ocaso de la Edad Media, El Decamerón fue prohibido por la Inquisición de la Iglesia católica e incluido en su Index Librorum Prohibitorum, es decir, el índice de libros prohibidos. ¿La razón? La sensualidad y los temas paganos de los relatos que los viajeros varados narran en las páginas de El Decamerón no agradó a la moral católica de la época.

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Los viajes de Gulliver, Jonathan Swift.


Gulliver atrapado por liliputienses.


Los viajes y las aventuras de Lemuel Gulliver entre gigantes, gente diminuta, una tribu de caballos y ciudades en el cielo fueron, desde su aparición en 1726, una fuente de discusión y polémica. A lo largo de la historia ha sido censurado y prohibido por causas como estas: la sensibilidad de los témas políticos que satiriza, por obsceno y retorcido, por la representación de escenas de orina en público y por blasfemo.

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Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll.


La prohibición de Alicia en el país de las maravillas en China se debió a causas más extrañas: las elegantes y exquisitas ilustraciones de John Tenniel (como la de aquí arriba) antropomorfizan a los animales y los sitúan al mismo nivel que los seres humanos, y esto fue suficiente para que el General Ho Chien determinara que el libro fuera prohibido.

sábado, 12 de abril de 2014

Cálamo se transforma. Muta. ¡Cálamo cambia y te invita a participar del cambio!




No hay nada más aburrido que vivir y trabajar siempre en el mismo espacio.

Uno puede hacer siempre más o menos lo mismo sin sufrir demasiado –qué le vamos a hacer, a todo nos adoptamos–. Pero si lo cotidiano se realiza rodeado de los mismos objetos, la misma cortina color beige, la estantería repleta de fotos ajadas, el eterno lienzo de aquel pintor que prometía, del sillón heredado de tu padre, del sacacorchos pretencioso regalo de boda.... entonces se torna insufrible, insano y absurdo.
Seamos sinceros. A todos nos gustaría ser ávidos lectores practicantes de la Ética promiscua. Una guía práctica para el poliamor, las relaciones abiertas y otras aventuras (obra de D. Easton y J.W. Hardy, publicado por Melusina... ¡ya en su segunda edición!). Pero normalmente optamos por ser fieles a nuestra pareja (los que la tenemos, claro) y vivir eternamente con ella, lo que ni es bueno ni malo, simplemente es. Si al ya difícil día a día se añade el abandono propio y ajeno, el mismo vaquero tieso, la sosa camisa de cuadros comprada de saldo, el exceso de perfume “démodé”, el corte de pelo años 80 escapado de la peor pesadilla de Travolta ...entonces.... ¡Patapaf!, todo se va al carajo más pronto que tarde. 
Cambia pareja por amigos. Todos los sábados y fiestas de guardar con los mismos colegas. ¿Sabes de lo que hablamos? Al menos que Pepe no nos cuente siempre la misma anécdota de su viaje a Marruecos, que llevamos siglos visitando e invadiendo a nuestros vecinos del sur. Que María no pida siempre huevos rotos con foie por favor, que se nos revuelve el estómago.
Para vivir, para no caer en los insondables pozos de la amargura psicoanalítica, necesitamos que al menos los pequeños detalles que nos rodean no sean siempre los mismos.
Ni nos gusta aburrir ni nos gusta aburrirnos.
He aquí una buena máxima empresarial. Y Cálamo –empresa librera de escaso pero persistente rendimiento– hace suya tan tremenda sabiduría.

Por eso –una vez más y no será la última– Cálamo se transforma, muta y cambia.



Queremos muchas cosas, algunas que ni si quiera sabemos formular con claridad. Pero otras sí:

• Poner en valor (¡perdonad esta expresión tan manida!) la historia de la librería. En 30 años de trabajo han pasado muchas cosas en Cálamo, algunas documentadas y otras no, somos malos archiveros. Queremos que se vean, que se sienta que nuestras estanterías atesoran muchos recuerdos, anuncio de otros venideros.
• Hacer visible y comprensible el trabajo de gestión cultural que realizamos en México, Colombia y otros países latinoamericanos (y también en Europa). Muy exigente y muy divertido.
• Queremos ofrecerte espacios más agradables, más cómodos y divertidos, más atractivos. Que puedas servirte un buen vino y sentarte a hojear o leer un libro. Que cómodamente sentado, tus manos alrededor de una taza de café –un excelente café– charles con tus amigos o con nosotros.
• Queremos ser más eficaces y profesionales: siempre se puede y se debe mejorar.

Ya ves, todo un programa casi electoral.
Y ahora viene lo mejor: te necesitamos.
Necesitamos tus opiniones y consejos, que nos digas lo que hacemos mal y lo que hacemos bien. Que nos sugieras en qué podemos mejorar. Que nos digas qué es lo que te gusta de Cálamo y qué no.
Para todo ello te invitamos, te rogamos, que te acerques a tu librería los próximos días 14,15 y 16 de abril dispuesto a hablar y a escuchar nuestro proyecto. Si vienes a partir de las 18.30 te esperaremos con una copa de vino, que ya se sabe que ayuda a soltar la lengua. Y si vienes por la mañana, con un café.
Y te esperamos para algo más: todas las compras que nos hagas esos días irán destinadas a sufragar los gastos de la reforma.
Anda, ¡no te hagas de rogar y acércate a Cálamo! 
Si vives fuera o estás de vacaciones escríbenos por email (calamo@calamo.com), Facebook o carta manuscrita: prometemos contestarte.


Un abrazo fuerte.
En nombre de Cálamo, Paco Goyanes

miércoles, 9 de abril de 2014

«No sé si me convertí en poeta. Diría, mejor, que asumí pronto la poesía como una forma de estar en el mundo». Entrevista a Antonio Lucas, Premio Loewe de Poesía.

Licenciado en Periodismo, periodista, columnista y redactor de Cultura en el diario El Mundo, colaborador de RNE y poeta: Antonio Lucas nos visita este sábado para presentarnos Los desengaños (Visor), su último poemario, ganador del último Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe. Desde las 13 horas, conversará con Manuel Vilas. Para anticipar lo que sin duda será una tarde genial, conversamos con Lucas sobre periodismo, poesía y libros:

Antonio Lucas. Fotografía de José Aymá.
¿Cuáles son "los desengaños" que dan título al libro?

Sospecho que desengaños de uso corriente, accesibles y universales: una ruptura sentimental y un desafecto hondo con el presente al que nos han arrastrado y al que nos hemos dejado arrastrar. Esas dos vías de lectura generan un conjunto de poemas que empieza hablando desde un 'nosotros' colectivo para desembocar en el 'yo' dañado... En cualquier caso, el primer desengaño de mis desengaños soy yo mismo. 

El poemario te ha significado el XXVI Premio Internacional de Poesía de la Fundación, uno de los más importantes premios literarios de la poesía en castellano que se suma a una larga lista de otros galardones: ¿qué efectos tiene en tu oficio, en tu enfrentamiento con el próximo poema, el próximo libro, un premio tan importante?

Si preguntas por el efecto de los premios en el poema, ninguno. La decisión de presentar un libro a un galardón es una idea que, en mi caso, siempre viene a última hora, cuando el libro está acabado y desde una inconsciencia escasamente reflexiva. Lo que vendrá a partir de ahora serán más poemas, aunque no sé de qué tono, ni tradición, ni pelaje, ni raza.

Redactor cultural en El Mundo y redactor de versos, ¿puedes contarnos cómo te convertiste en poeta, cómo te convertiste en periodista?

No sé si me convertí en poeta. Diría, mejor, que asumí pronto la poesía como una forma de estar en el mundo, de descifrármelo y descifrarme dentro de él, pero sin conversiones. La poesía estaba ahí, en la biblioteca de mi padre, y yo estaba cerca, con el brazo largo y tiempo por delante. Respecto al periodismo, desde adolescente leía con entusiasmo dos periódicos al día y escuchaba radio sin tregua. Yo quería ser de esos que contaban la vida, que le daban megafonía a las cosas que suceden. Hice una carrera absurda, Ciencias de la Información, que fue como hacer cinco veces COU y muy pronto comencé a trabajar en El Mundo (a los 20 años). Algún tiempo después, cuando ya llevaba tres o cuatro en la redacción, comencé a intuir que empezaba a ser periodista. Y en ello sigo. Me flipa este oficio.

¿A quién admiras en cada una de estas disciplinas? ¿Quiénes son tus maestros literarios y periodísticos?

¿Me obligarías a decirlos todos sin agua cerca ni un 'revital'? Lo vamos a hacer más difícil. Diré uno por cada frente. En poesía: Rimbaud. En periodismo: Chaves Nogales.

La mordida moneda de los años -

¿Hay una mezcla de voces, la del periodista y el poeta, en tu obra poética? ¿Y en tu labor periodística?

Diría que son como los raíles de un tren, uno 'al laíto del otro, to seguío, to seguío' (como dice la letrilla de una hermosa toná flamenca)... Los trasvases son puntuales y tienen más que ver con la mirada que con el ejercicio y los modales de escribir. Si el periodismo se hace lírico termina en mala mercromina. Si la poesía se pone periodística, acaba en estadística. 

Suele preguntarse a los escritores qué papel cumple la literatura en la actualidad. ¿Qué función, si es que la hay, cumple la poesía?

El poema es una forma de rebeldía. La poesía, como apunta Luis Antonio de Villena, es una acusación y una salvación.

Y por último, una pregunta de libreros: ¿qué libros nos recomiendas?

Los que sugieran los amigos de Cálamo, que para eso son lectores audaces y libreros admirables.



La charla sigue este sábado en Cálamo. ¡Hasta entonces!